HALCON PEREGRINO

El halcón peregrino mide entre 34 y 58 cm, tanto los machos como las hembras tienen plumaje y marcas muy similares pero al igual que otras aves muestran un marcado dimorfismo sexual en su tamaño en donde la hembra es un 30% mayor que el macho; los machos pesan entre 500 y 700 gramos y las hembras entre 900 y 1500 gramos.

La espalda y las largas y puntiagudas alas de los adultos varían generalmente de un negro aulado a un gris con barras oscuras indistintas, los extremos de las alas son negros; el vientre y la zona interna de las alas varían de color blanco a oxidado y tienen finas barra de color marrón oscuro o negro; la cola coloreada como la espalda pero con barras limpias y finas, es larga, estrecha y redondeada al final con la punta negra y una banda blanca en su extremo; la parte superior de su cabeza junto con su amplia bigotera a lo largo de las mejillas, es negra contrastando de forma notoria con los lados pálidos del cuello y la garganta blanca; la cera es amarilla como las patas y el pico y las garras son negras. El pico superior es cerrado cerca de la punta, una adaptación que permite a los halcones matar a sus presas cortándoles la columna vertebral en el cuello.


El halcón peregrino se alimenta casi siempre de aves de un tamaño medio como son los patos, pájaros cantores y las palomas. También en ocasiones murciélagos que caza por las noches es muy raro que casara pequeños mamíferos, solo de vez en cuando ratas, liebres, ratones y ardillas.


Caza al amanecer y también al anochecer, cuando la presa es más activa, en particular en periodos de migración es cuando la caza nocturna se hace más frecuente.


Para la caza requiere de espacios abiertos por lo que por lo regular lo hace sobre lagos, pantanos, valles, campos y tundra. Busca sus presas desde una posición elevada o desde el aire. Para proteger sus ojos los halcones usan sus membranas nictitantes para limpiar las lágrimas y proteger los ojos manteniendo la visión. Sus presas son golpeadas y capturadas en el aire, en los casos cuando las presas son muy pesadas las deja caer al suelo.


Los halcones peregrinos son sexualmente maduros al final de su primer año de vida pero por lo regular se reproducen al alcanzar los dos o tres años de edad; se emparejan de por vida y regresan al mismo nido cada ano. El vuelo de cortejo incluye una mezcla de acrobacias aéreas, espirales precisas y vuelos siguiendo la figura de un ocho. El macho le pasa a la hembra una presa capturada mientras están todavía en el aire y para poder hacerlo la hembra vuela literalmente alrevez para recibir la comida de las garras del macho; el halcón peregrino es territorial en la temporada de cría, las parejas que están anidando se sitúan por lo regular a una distancia de un kilometro entre ellas, la distancia entre nidos asegura el suministro de comida suficiente para los padres y las crías.